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Aspectos legales al crear tu página web

Aspectos legales al crear tu página web

Crear y administrar una página web requiere algo más que una atractiva estética y contenido relevante. Hay una serie de cuestiones legales esenciales que deben tenerse en cuenta para garantizar que tu sitio web no solo es un éxito desde una perspectiva de negocio o personal, sino que también cumple con las normas y regulaciones vigentes. Si ignoras estas cuestiones, puedes exponerte a sanciones legales, multas e incluso demandas.

Pero no consideres estos aspectos legales como una carga burocrática que simplemente tienes que soportar. De hecho, están diseñados para proteger los derechos tanto de los usuarios de tu sitio web como los tuyos como propietario del sitio. En el mundo digital, la confianza y la credibilidad son fundamentales, y un sitio web que respeta y garantiza los derechos de sus usuarios se gana esa confianza y credibilidad.

Así que, ¿qué implica realmente cumplir con la legalidad en la web? Este artículo pretende desglosar las normativas más importantes y lo que exigen. Entenderás mejor cómo estas leyes se aplican a tu sitio web y cómo puedes tomar medidas para garantizar tu cumplimiento.

LSSICE

La Ley 34/2002 sobre los Servicios de la Sociedad de la Información y Comercio Electrónico (LSSICE) establece las responsabilidades específicas que los dueños de páginas web deben obedecer en España, siendo un componente crucial de la legislación española.

De acuerdo con la LSSICE, se exige que el propietario de una página web se identifique de manera transparente con toda su información. Esto comprende detalles como el nombre o la denominación social, el NIF/CIF, la dirección al completo, y los datos de inscripción en el Registro Mercantil si se trata de una empresa. Si tu actividad requiere un permiso administrativo o la inscripción en un registro específico, esta información también deberá estar presente en tu sitio web.

La ley también exige que los sitios web ofrezcan un medio claro y directo para que los usuarios se comuniquen con el titular de la página. Esto podría ser un formulario de contacto, una dirección de correo electrónico, o un número de teléfono. Los usuarios deben poder utilizar este medio para realizar consultas, presentar quejas, solicitar información, etc.

Los Avisos Legales representan un componente obligatorio de cualquier página web y deben contener una serie de información crucial. Esto comprende las condiciones de uso del sitio, la política relativa a los derechos de propiedad intelectual de los contenidos, la descarga de responsabilidad respecto al contenido de otras páginas web a las que se haga referencia, y las jurisdicciones aplicables en caso de conflicto. Es de gran importancia mantener estos avisos actualizados de manera regular y mostrar una fecha de actualización fácilmente visible.

Otra regulación crucial de la LSSICE se refiere al uso de cookies. La ley prohíbe la instalación de cookies en el ordenador del usuario sin su autorización, con la excepción de las cookies de sesión. Para obtener la autorización del usuario, debes informarle sobre qué cookies se instalarán y para qué se utilizarán. Esta información generalmente se proporciona a través de un aviso de cookies que aparece cuando el usuario visita el sitio por primera vez, ofreciéndole las opciones de “Más información”, “Aceptar” o “Configurar” las cookies que se instalarán.

RGPD y LOPDGDD

El Reglamento General de Protección de Datos UE 2016/679 y la Ley Orgánica 3/2018 de Protección de Datos de Carácter Personal y Garantía de los Derechos Digitales representan un marco esencial para cualquier página web que recolecte, almacene o procese datos personales.

El RGPD y la LOPDGDD obligan a los propietarios de páginas web a informar a los usuarios sobre cómo se tratarán sus datos personales. Esto puede hacerse a través de formularios, correos electrónicos, o cualquier otro medio a través del cual el usuario proporcione sus datos.

La Política de Privacidad representa uno de los documentos esenciales en cualquier página web. Este documento debe incluir información detallada como: identificación del responsable del tratamiento de los datos, y si corresponde, del delegado de protección de datos; los objetivos de la gestión de los datos; la legitimidad para procesar los datos; la duración de la conservación de los datos; los destinatarios de la información; los derechos de los usuarios respecto a sus datos personales y cómo pueden ejercerlos; la autoridad de supervisión a la que pueden presentar una queja, y la necesidad de mantener los datos al día y precisos.

Dado que la información de la política de privacidad puede ser amplia y generalmente se presenta en un enlace independiente, las normativas exigen que se presente un resumen de los aspectos básicos de manera breve, clara y sencilla en los formularios donde se recolectan los datos. Además de proporcionar un enlace al documento completo, se debe indicar quién es el responsable del tratamiento de los datos, cuál es la finalidad del tratamiento y cómo pueden ejercer sus derechos los usuarios. Esta cláusula informativa se suele situar al final del formulario o, si no es técnicamente posible, al principio de la Política de Privacidad.

RDL 1/2007 y Ley 7/1998

Si tienes un comercio electrónico, debes prestar especial atención a las regulaciones que aplican específicamente a esta área. La Ley para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (RDL 1/2007) y la Ley sobre Condiciones Generales de Contratación (Ley 7/1998) junto a la LSSICE (Ley 34/2002) establecen un marco legal que regula las transacciones online y la protección del consumidor.

Cualquier operación comercial realizada a través de tu web implica la necesidad de un contrato claro y preciso que regule las condiciones de la transacción. Este contrato se conoce como Condiciones Generales de Contratación, y su contenido está regulado por ley, debiendo ser presentado de una manera que sea fácilmente comprensible. Tener estas condiciones bien redactadas ayudará a prevenir posibles problemas e incidencias.

El contrato debe contener, como mínimo, los siguientes aspectos:

  • Información completa del vendedor, incluyendo la identificación comercial, ubicación física, número de teléfono y dirección de correo electrónico. Si existe un lugar adicional para la gestión de quejas, también debe proporcionarse.
  • Explicación pormenorizada de las características principales de los productos o servicios que se ofertan.
  • El coste total de los productos o servicios, incluyendo todos los impuestos y gastos extras (como transporte, gestión, etc.). Si no se puede calcular de antemano el precio total, se debe indicar la posibilidad de costos adicionales.
  • Detalles específicos sobre las formas de pago, el proceso de entrega y la realización del servicio, así como la fecha en la que te comprometes a suministrar los productos o realizar el servicio.
  • Condiciones exhaustivas para el ejercicio del derecho de desistimiento, incluyendo un formulario estándar para su implementación. Si este derecho no existe o tiene limitaciones, también debe ser especificado.
  • Garantía legal de conformidad para los productos.
  • Detalles acerca del procedimiento de gestión de quejas, devoluciones y, si aplica, del servicio posventa y garantías comerciales.
  • En caso de que sean servicios, la duración del contrato, si existe una duración mínima, si las extensiones son automáticas y las condiciones de cancelación.
  • Cuando sea pertinente, la opción de usar un procedimiento extrajudicial de reclamación y compensación al que esté sujeto el vendedor, y cómo acceder a él.

Conclusión

En este mundo digital acelerado y siempre cambiante, los aspectos legales pueden parecer un obstáculo. Sin embargo, recordemos que estas regulaciones existen para proteger a todos: a los titulares de la página web y a los usuarios.

No hay que tomar estos aspectos legales a la ligera, pues forman parte de la base que permite que tu página web opere de manera segura, transparente y legal. Cumplir con estos requisitos legales protege a tu negocio y a tus usuarios. Además, también mejora tu reputación online y genera confianza entre tus visitantes.

Por tanto, a la hora de diseñar y lanzar tu página web, no olvides estos aspectos legales. Haz de la legalidad tu mejor aliado en el camino hacia el éxito online. ¡Comienza hoy a construir un espacio en Internet más seguro y legal!